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Imatge
Soy una mujer muy independiente. la vida me ha obligado a ser así. Me casé y he vivido durante 44 años con mi marido, pero muchas veces me sentí sola. Él era muy especial, extremadamente comodon. Nunca me acompañó. Únicamente en tres o cuatro veces al año.  Solo en  las ocasiones en las que  amigos se reunían para alguna comilona. Lo más duro fue los paseo cuando mis hijas eran bebés o niñitas. La mayor fue muy movida y necesitaba salir a la calle, corretear por los parques, jugar con otros niños. Nunca logre que el me acompañara. Se quedaba en casa, viendo la tv. Lo más grave es que tampoco permitía que vinieran amiguitas de la nena para jugar con ella. Hiciera frío o calor  cada día pateaba las calles hacia el parque más cercano. Tengo que puntualizar que entonces , en mi ciudad, había solo un par de parques. Su frase preferida, que repetia cuando yo me quejaba era: " Tú les has volgut... tú les tens " Muchas veces me he sentido sola, como este  d...
Imatge
He estado tan ocupada que no he tenido tiempo para escribir. Como medida para no deprimirme por la soledad me llené de diversas tareas. Lo cierto es que todas me gustaron. Este año me he apuntado a lo mismo: Competic ( un curso más avanzado),  Inglés (repetiré curso), Conferencias a la Universidad de Lleida y los miércoles enseñar catalan y español  a los "Menas". Los menas son emigrantes menores de edad. Este año querría dejar algo pero .... veremos. Espero seguir un camino correcto

Retorno

Imatge
He estado mucho tiempo sin escribir. No tenia internet en casa. Para evitar pensar llené mis dias  con muchas ocupacines. Tantas que, incluso, andaba estresada. Por una parte me fue bien porque me impidió sentirme solo pero tengo que buscar un termino medio para el curso que empezara el proximo mes. Lo cierto es que no se que debo dejar. Me cuesta elegir.

Alas

Imatge
                                                                                                                                                                                                         El verano pasó sin pena ni gloria, pero mis paseos por el exterior me ayudaron a sentirme mejor. Al final del mismo decidí vivir en la ciudad. Aprovechando que mi hija tiene un piso en ella, me instalé allí. Empecé a  recorrer la ciudad, redescubriendo lugares que fueron escena...
Imatge
Mi compañero partió en septiembre para el más allá. Después del sepelio entré en casa y  sentí la soledad por primera vez. Aquella casa tan grande y vacía parecía que iva a exprimirme entre sus paredes. Así  me sentí durante todo el invierno que, por cierto, fué muy duro respecto al clima. En febrero una sobrina vino a verme. "tía , no puedes seguir así" "Debes salir más de casa" Me convenció para que adoptara un perro.  El cuidado del animalito me obligaría a levantarme temprano, a salir a pasear y a moverme del sillón frente al televisor. Parecía que hacía meses que estaba pegada a él.  La verdad es que fué un buen consejo. He aquí mi nuevo compañero. No es comparable, pero el cariñoso animal me está ayudando a torear la soledad.
Imatge
Todavía no me he centrado. Mi vida parece un viaje en globo: Voy en la dirección que me lleva el viento. Me muevo  muchas veces sin pensar . Me conviene prestar atención a mis decisiones. Dejar de actuar por inercia.
Imatge
Va a hacer dos años que mi marido falleció. Llevábamos 45 años juntos. Hacía tiempo que dejó de ser mi amante para ser mi mejor amigo. La soledad me llegó sin darme cuenta y mi corazón se quedó helado, como esta  paige nevado. Pasé un mal invierno,  pero creo que he reaccionado a tiempo. Escribo este blog  para ver  cómo torear la negatividad de mi actuar estado.  Estamos en primavera y quiero sentirla en mi corazón.